¿Alguna vez has sentido que vives por un momento en un Universo Paralelo? A mí, aunque sea por unos instantes, me ha sucedido varias veces. Puedo describir la experiencia como algo totalmente sorprendente, que de hecho, me deja pensando un buen rato sobre el asunto, sembrándome la duda de si habrá sido un sueño, o habrá sido real… y sin importar la respuesta, para mí, es tan real que me deja una sonrisa en la cara durante horas y horas.
Los nuevos paradigmas de la ciencia han ido cambiando conforme los científicos han ido abriendo sus horizontes. Entre ellos, están los descubrimientos de Albert Einstein, que explicaba que pasado, presente y futuro coexisten y están sucediendo al mismo tiempo. Esto ayudaría a explicar el por qué hay veces que las personas dicen tener “premoniciones” que son aquellas en donde se “presiente” que algo pudiera suceder, o incluso gente que puede ver tal cual lo que sucederá en un momento del futuro.
Pero la ciencia, al igual que todo en este mundo, está dividida en los científicos rígidos, que no aceptan ninguna otra verdad que la suya; o los científicos modernos, que a través de experimentos y comprobaciones reales, abren temas como este y están dispuestos a explicarlo, aunque esto implique tener que hacer un “cambio de lentes”.
El famoso científico Rupert Sheldrake, hizo una investigación formal donde documentó más de 4,500 casos de animales domésticos que saben cuando su dueño va a llegar a casa, adoptando una conducta diferente, de emoción, incluso horas antes de que su dueño llegue, quedando descartadas posibilidades como que “lo sabían por el olfato”, o como que “escucharon el coche cuando iba a llegar”. (Sheldrake, 2011)
Sheldrake, quien hizo también una investigación sobre los campos morfogenéticos, explica que dichos campos se interconectan y coordinan como parte de un sistema de espacio - tiempo, conteniendo además una memoria colectiva de otros sistemas similares previos; y que este proceso en el cual la memoria se transfiere del pasado al presente es llamada “resonancia mórfica”.
Juntando todo lo anterior con el nuevo paradigma holográfico (Karl Pribram), que explica que el Universo es como un holograma gigante en donde el cerebro es el intérprete de la realidad, entonces tenemos como resultado que efectivamente, la mente humana está en posibilidades de acceder a dimensiones, espacios y tiempos diferentes, así que te invito a que eches a volar tu imaginación, y descubras todo lo que puedes vivir y sentir, experimentando estas sensaciones placenteras y útiles en la construcción de tu realidad.
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Referencias: Sheldrake, Rupert (2011). Dogs that know when their owners are coming home. Nueva York, Three Rivers Press Editorial.
