Hace muchos años, llegué a pensar que tal vez yo era un "bicho raro" en esta sociedad, y que quizás ni pertenecía a esta época que me había tocado vivir.
El otro día recordaba cuando aprendí a sumar. Fue un momento muy importante en mi vida. Me encantaba sumar! Y ver esos números, uno encima del otro y con el signo de más a un lado. Al principio eran sumas muy sencillas, de un solo dígito, como 2 + 2, y siempre me sabía la respuesta. Después, ya eran sumas de dos dígitos arriba y abajo, o a veces hasta de 3 o 4 filas! Era un gran reto, pero era tan fácil sumar!...
A veces pareciera que la vida es como ir cruzando en una cuerda floja, y sin traer ninguna protección. Ráfagas, movimiento, equilibrio, concentración, incertidumbre, viento en la cara, pánico, adrenalina, expectativa, objetivo, sueños, en fin. La vida es. Punto. La vida es, y ya. Y en el circo de la vida, cada uno de nosotros tenemos la oportunidad de decidir. Decidir todo o decidir nada. Cosa simple como, ¿en dónde quieres caer?.
¿Alguna vez has sentido que vives por un momento en un Universo Paralelo? A mí, aunque sea por unos instantes, me ha sucedido varias veces. Puedo describir la experiencia como algo totalmente sorprendente, que de hecho, me deja pensando un buen rato sobre el asunto, sembrándome la duda de si habrá sido un sueño, o habrá sido real… y sin importar la respuesta, para mí, es tan real que me deja una sonrisa en la cara durante horas y horas.
La mayoría de las personas constantemente estamos en busca de un “EQUILIBRIO”, el cual, en ocasiones, pareciera que nunca llega: equilibrio emocional, financiero, laboral, familiar, en fin. Cuando sucede una situación fuerte en la vida, es como si nos dieran una buena sacudida; y eso que antes parecía estar “equilibrado”, ahora tal vez está hecho bolas, disparado, o todo desordenado.
Lo maravilloso de mi trabajo es lo mucho que aprendo en cada sesión, con cada persona. A veces me pregunto si no recibo más de lo que ellas se llevan. En este proceso de crecimiento personal ambas partes involucradas nos nutrimos y desarrollamos. Por momentos se funde o confunde la persona que guía con la persona guiada, la persona orientada con la persona que orienta.